La iniciativa Slow Foot está vinculada a la filosofía de vida de la empresa Indemini Báez Chocolate y sus tiendas «Chez Tiff Artesanal». Desde el año 2002, esta empresa familiar ha estado elaborando chocolates y confites en Quito, Ecuador. Su enfoque se basa en el respeto a la naturaleza y la producción de alimentos limpios, justos, sanos, biodiversos y ecuatorianos. La tienda principal, Indemini Báez Chocolate, lleva el nombre de la familia productora y la tienda «Chez Tiff Artesanal» lleva el nombre de su hija mayor. El término «artesanal» se refiere a que cada producto en su tienda es único, hecho a mano con paciencia y cuidado. A partir de 2010, la empresa comenzó a investigar el cacao y la historia cacaotera de Ecuador. En 2011, decidieron trabajar con chocolate de origen, específicamente el cacao Arriba de la finca Limón en la provincia de Cotopaxi. Desde entonces, han estado desarrollando el chocolate a partir del grano de cacao de esta finca, utilizando buenas prácticas agrícolas y produciendo colecciones exclusivas de pequeñas fincas con cacaos nacionales o cacaos silvestres.  La empresa es una de las pocas en la ciudad de Quito que procesa el cacao desde el grano hasta el chocolate terminado. Han construido un conocimiento agrícola en colaboración con Samuel-von-Rutte, el propietario-agricultor de la finca Limón. Además, exploran cacaos de diferentes fincas ecuatorianas, manteniendo la tendencia de producir chocolate de una sola finca y resaltando los diferentes sabores y orígenes.  Acutalmente Indemini Báez Chocolate abrió su tienda en el Centro Histórico de Quito,  donde trabajaban en vivo y conquistaron a paladares nacionales e internacionales sofisticados que valoraban la calidad del trabajo artesanal y el amor por la materia prima limpia, biodiversa y bajo principios de comercio justo.